A casi dos meses de finalizar el año, un pacto en la reforma de las pensiones resulta prácticamente imposible. Tras las 10 sesiones que ha mantenido la Comisión de Seguimiento y Evaluación de los Acuerdos del Pacto de Toledo, los representantes parlamentarios que participan en ella, no han conseguido alcanzar un acuerdo que mejore la situación de las Pensiones en España.
Y dado el ritmo al que avanzan las negociaciones, no se preveé que ni el Congreso ni la Mesa de Pensiones alcance un consenso a corto plazo. A 24 de Octubre, el Ministerio de Empleo no ha vuelto a convocar a los agentes sociales desde marzo y los constantes desacuerdos por parte de los grupos parlamentarios frente al índice de revaloración, la falta de consenso y la preocupación acontecida por la crisis catalana, ha provocado que las negociaciones entren en un punto muerto.
Y es que, esas reuniones estaban encaminadas a acordar una serie de recomendaciones que se reflejaran en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2018. Y como parece que no se van a producir avances en las negociaciones, todo apunta que en 2018 los pensionistas volveremos a ser castigados con la pérdida de nuestro poder adquisitivo, ya que tras quinto año consecutivo la subida anual de las pensiones se mantendrá en el límite legal, establecido en el 0,25%.
¿En qué situación nos encontramos los pensionistas y jubilados en España?
Brecha de Género en las Pensiones
La diferencia entre las pensiones de hombre y mujeres es abismal. El tiempo que ocupan las mujeres en el cuidado de los hijos y de personas mayores dependientes, hace que sus carreras de cotización sean menores, y por tanto, que tengan una pensión considerablemente menor que la de los varones. En cifras, el 51,4% de las pensiones contributivas del sistema (4.914.591) las reciben mujeres, frente a 4.637.529 pensiones percibidas por varones (48,6%).
Las últimas cifras publicadas por la Seguridad Social a día 1 de octubre, establecen la pensión media de jubilación de una mujer en 787,39 euros frente a la pensión media de un hombre, establecida según los datos de la Seguridad Social, en 1237,22 euros. 450, 38 euros de diferencia entre la pensión media de las mujeres y los hombres jubilados en España.
Pensionistas por debajo del umbral de la pobreza
En nuestro país, las personas en riesgo de pobreza se encuentran en una situación donde viven en un hogar con una renta inferior al Umbral de pobreza, establecido en el años 2016, en 8.208,5 €, es decir, 684 € mensuales para un hogar compuesto por una sola persona (es decir, una unidad de consumo).
Según el último informe publicado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español(EAPN-ES) EAPN alrededor de 4.716.000 pensiones, la mitad del total, están bajo ese umbral de la pobreza (inferiores a 684€ mensuales): el 40% de las pensiones de jubilación, el 70% de las pensiones de viudedad y casi el 90% de las de orfandad. Según los datos del Ministerio de Empleo recogidos por la EAPN, en 2016, de las 9.473.482 pensiones que se abonaron , el 50% no llegaron a los 677,6 euros mensuales.
Si analizamos los datos de la pensión media por viudedad por comunidades autónomas, nos encontramos ante la situación que en muchos de los territorios españoles no alcanzan esos 684€ mensuales en sus pensiones medias, como en las provincias gallegas de Lugo, donde la pensión media por viudedad está establecida en 473,25 y en Orense donde las personas viudas reciben una media de 483,23 euros al mes.
Pérdida del poder adquisitivo
En la vida cotidiana, muchos son los ciudadanos, especialmente los que tienen las pensiones más baja, han visto cómo en el mercado, los precios son más caros, los suministros energéticos más elevados…En estos tres o cuatro años, un jubilado ha ganado 4, 5 euros más al mes, y solamente el recibo de la luz ha subido 6 u 8 euros. Nos encontramos ante una preocupante situación en la que las pensiones están perdiendo su poder adquisitivo gracias a la imposición desde 2013 del Indice de Revalorización Anual de las Pensiones frente a revalorizar las pensiones conforme al IPC (el incremento de pensiones del 0,25% anual o como mucho del 0,5% quedará muy por debajo del coste de la vida), lo que producirá un grave y creciente empobrecimiento de los pensionistas a lo largo de su vida (conviene recordar que la pensión media se sitúa en 918 euros mensuales).
Todo parece indicar que vamos a tener un incremento de la inflación y por lo tanto, las pensiones de las Personas Mayores van a quedarse casi congeladas o con un incremento del 0,25%, el cual por si mismo, supone una cuasi congelación.
Desde la Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados (UDP), seguimos insistiendo en reclamar la urgente adopción de medidas que supongan la recuperación del poder adquisitivo de los pensionistas, que pasan por cambiar los términos de la actualización anual fija del 0,25% estipulado desde 2013, por el incremento anual de las pensiones en función del Índice de Precios de Consumo (IPC), así como la necesaria subida de las pensiones más bajas, equiparando al menos la pensión mínima con el salario mínimo, establecido en 707,60 euros.