Felicidad y salud
Una actitud positiva ante la vida proporciona mayor felicidad en la vejez que el estado de salud, según una investigación desarrollada por la Universidad de California en San Diego. El estudio pone de manifiesto que el optimismo y la actitud de “hacer frente” a las cosas son más importantes para conseguir un envejecimiento feliz, que las mediciones tradicionales de salud y bienestar. Una nueva percepción del envejecimiento que pone fin a la creencia de que el buen estado físico es sinónimo de un envejecimiento óptimo.
Los más viejos del lugar
Si usted es castellano leonés, está de enhorabuena. Según Ramón Cacabelos, presidente de la Sociedad Española de Medicina Genómica, “Los castellano leoneses tienen más posibilidades de tener una vida longeva, porque la prevalencia del gen APOE-2, principal marcador de la longevidad, es entre ellos un 1% mayor que en el resto de España. También tienen menos probabilidades de tener demencia, pues presentan el gen APOE-4, el principal marcador del Alzheimer, en un 1% menos.
Jamón, rico y sano
El jamón no sólo está buenísimo, sino que es saludable ¡menos mal! Antonio Villarino, profesor de nutrición de la Universidad Complutense de Madrid, recomienda su consumo como alimento rico en vitamina B, fundamental para prevenir el colesterol malo y las enfermedades cardiovasculares. Además, el jamón contiene vitamina B3, que produce energía, cuida la piel y el sistema nervioso, y vitamina B1, responsable del mantenimiento del cerebro y las células nerviosas sanas. ¡A comer!
Sangre en la nariz
Muchas veces hemos oído que para frenar una hemorragia nasal lo mejor es echar la cabeza para atrás. Sin embargo es un error muy extendido y peligroso, ya que si el sangrado es abundante puede provocar problemas respiratorios. Resulta que es más eficaz inclinar la cabeza hacia delante. En lugar de echar la cabeza para atrás lo que debemos hacer para conseguir frenar la hemorragia es precisamente todo lo contrario, inclinar la cabeza hacia adelante y, eso sí, taponar cuanto antes la nariz.
Quemaduras
Nunca se deberán aplicar sobre la quemadura pomadas, aceites, algodón o pasta dentífrica, tal como predican algunos remedios caseros. Lo más adecuado en casos de quemaduras con agua, aceite o por contacto con algún cuerpo muy caliente es siempre la aplicación de abundante agua fría. Con ello conseguimos que la zona recupere su temperatura normal y no dañar los tejidos afectados. Una vez superados los primeros momentos tras el accidente, lo adecuado es acudir a un especialista que podría recetar una pomada especial para quemaduras.
Atragantados
El clásico golpe en las espalda puede ayudar al atragantado, aunque sólo en los casos más leves. Sin embargo, la acción más indicada en estas ocasiones es aplicar la conocida “maniobra de Heimlich”, un golpe seco propinado con las manos justo debajo del esternón mientras se rodea al sujeto con los brazos desde atrás. Este movimiento levanta el diafragma e impulsa el aire de los pulmones hacia afuera, empujando y expulsando el cuerpo extraño. En otros casos, bastará con abrir la boca del atragantado y extraer el objeto que provoque la obstrucción.
Picaduras
No suelen ser situaciones graves, ya que el único riesgo reside en que el afectado padezca hipersensibilidad o algún tipo de alergia al veneno, lo que puede provocar episodios de hipotensión. En los casos en los que el afectado no sea alérgico a las picaduras bastará con la aplicación inmediata de frío en la zona en la que actuó el insecto, normalmente abejas o avispas. Sólo en el caso de que la hinchazón sea muy extensa y produzca dolor se debe acudir al médico para recibir un tratamiento.
