V Congreso Mundial de Programas Intergeneracionales

Expertos, organizaciones, personas mayores, estudiantes universitarios, voluntarios, representantes políticos y medios de comunicación se reúnen el 25 y el 26 de mayo de 2017, en Madrid, para conocer Homeshare como respuesta intergeneracional a los nuevos desafíos demográficos, así como otras experiencias solidarias e innovadoras de convivencia en el mundo.

El Congreso cuenta con un programa con ponentes destacados en el mundo del envejecimiento activo y la convivencia intergeneracional para dar a conocer Homeshare como respuesta a determinados desafíos demográficos, así como otras experiencias solidarias e innovadoras de convivencia intergeneracional en el mundo.

El congreso que organizan Homeshare International (HI) y Solidarios para el desarrollo tiene como lema “Tender puentes, ampliar Homeshare” para hacer hincapié en la necesidad de llegar a más personas, de forma que Homeshare sirva de puente entre distintas generaciones en todo el mundo.

Un público variado

El congreso interpela a legisladores o trabajadores del gobierno en materias relacionadas con envejecimiento activo, con vivienda y con educación. También resulta de especial interés para periodistas  que quieran ampliar sus conocimientos sobre temas relacionados con el envejecimiento activo, la convivencia intergeneracional, el voluntariado y movimientos sociales relacionados con mayores. Se dirige a usuarios de algún programa de Homeshare, a personas del mundo universitario que promuevan programas de convivencia intergeneracional y a posibles financiadores de programas.

El congreso ofrece una oportunidad para compartir saberes y experiencias con miembros de organizaciones que trabajen con mayores y otras interesadas en programas de convivencia intergeneracional o en temas de mayores, así como con cualquiera que esté interesado en promover una vida independiente y un envejecimiento activo para las personas mayores.

Beneficios de Homeshare

Homeshare permite que dos personas compartan hogar por beneficio mutuo. En la mayoría de los casos, reúne a personas mayores en sus casas con personas más jóvenes, muchas veces estudiantes universitarios, para hacerse compañía en una experiencia de aprendizaje mutuo y de solidaridad intergeneracional. Este movimiento mundial principalmente, con sus propias características y modelos, en Estados Unidos, en España, Francia, Bélgica, Alemania y Reino Unido, en Japón y en Australia,  aunque existen programas en otros países.

La experiencia intergeneracional Homeshare ofrece muchos beneficios. Fomenta una vida independiente pero con vínculos sociales fuertes entre distintas generaciones y culturas. Mientras refuerza los vínculos familiares y sociales de las personas mayores, aporta al mismo tiempo una alternativa de vivienda asequible y fomenta el apoyo mutuo y la solidaridad. Además, aporta compañía y seguridad a las personas mayores durante la noche. Gobiernos locales como el de Madrid o el de Melbourne, Australia, han comenzado a apostar por un apoyo institucional y económico a programas intergeneracionales por el ahorro que supone en gasto público dedicado a salud y a cuidado de los mayores, y por los múltiples beneficios sociales.

Convivencia intergeneracional en España

Hace unos meses, representantes de programas de convivencia entre personas mayores y estudiantes universitarios de distintas ciudades se reunieron en Madrid para establecer posibles estrategias de impacto colectivo y de trabajo en red entre los  programas de convivencia intergeneracional en España (ver programa). SOLIDARIOS, que cuenta en Madrid con Convive, una de las iniciativas de convivencia entre mayores y estudiantes con mayor número de convivencias gestionadas cada año, convocó la primera Jornada técnica de programas de convivencia intergeneracional. Participaron además programas de Alicante, Burgos, Elche, Ferrol, Málaga, Salamanca, Sevilla, León y Valladolid. Podrían incorporarse a la red más adelante los programas de Almería, Bilbao, Castellón, Barcelona, Girona, Granada, Murcia, Valencia y Vitoria.

El 62% de los programas en España los gestiona una universidad, el 13% por un gobierno local y casi el 20% por ambas instituciones públicas. Sólo un 6% es gestionado por una organización sin ánimo de lucro, aunque éstas gestionan más del 50% del total de convivencias anuales.

Cuatro de cada diez de los estudiantes acogidos en casa de una persona mayor son extranjeros, lo que enriquece con un componente intercultural a las convivencias entre personas de distintas edades. Como requisitos básicos, casi todos los programas coinciden en la necesidad de que la persona mayor tenga cierto grado de autonomía y de salud física para que el estudiante no se convierta en un cuidador a tiempo completo.

El 100% de los programas reciben tienen fondos públicos como principal fuente de financiación. Sólo un programa es cofinanciado con fondos privados, lo que plantea quizá la necesidad de repensar modelos más sostenibles en el tiempo y que no dependan de los gobiernos de turno.

Conocer mejor los programas intergeneracionales puede abrir camino para ampliarlos y para mejorar su gestión, además de convertirlos en una respuesta viable y eficaz al envejecimiento de la población, con sus consecuencias para gastos en salud y residencias, y en el encarecimiento de la vivienda para miles de jóvenes.