El maltrato, una lacra oculta

El salón de actos del centro cívico casa Luna de Valladolid ha acogido el V Curso de Prevención de Malos Tratos a Personas Mayores, organizado por Unión Democrática de Pensionistas, UDP, y el IMSERSO con la colaboración del Ayuntamiento de Valladolid.

Inauguraron el acto el diputado Víctor Alonso Monge; la gerente territorial de Servicios Sociales en Valladolid, Mª Angeles Cantalapiedra; Rafaela Romero, concejala de Servicios Sociales de Valladolid; y la directora gerente de UDP, Paca Tricio.

Posteriormente se desarrollaron las ponencias a cargo del vicepresidente de la Fundación Tutelar de mayores de Castilla y León, Daniel Rueda, que habló sobre los indicadores de riesgo en el ámbito doméstico e institucional; Virtudes Niño, profesora de enfermería en la vejez de la Universidad de Valladolid, explicó el estrés del cuidador familiar y profesional; Rafael Valdivieso, jefe del Centro de Programas para Mayores del Ayto. de Valladolid; Clara del Rey, inspectora de la Policía Nacional; y Javier Alvarez Souto, sociólogo y coordinador del programa de prevención al maltrato en UDP.

Durante el seminario se han dado algunos datos sobre el maltrato a personas mayores, como que el 5% de los mayores españoles sufre algún tipo de maltrato o abuso, pero que sólo el 10% de estos casos concluye con una denuncia formal.

El perfil de la víctima suele ser una mujer mayor de 75 años, físicamente impedida, con deterioro psicofísico y funcional. El 72% de las víctimas conviven con su agresor que, en tres de cada 10 casos, es su cónyuge.

La forma más sencilla de detectar un maltrato o abuso a una persona mayor es la denuncia o queja de la propia persona mayor. Sin embargo, si ya existen dificultades para denunciar en los casos de malos tratos a mujeres y menores, mayor dificultad tienen las personas mayores, porque el ámbito donde se producen es más cerrado y privado y en muchas ocasiones resulta muy duro para la persona mayor denunciar a sus hijos/as, de los que además suelen depender física, emocional y económicamente.

En relación a los signos, además de las posibles lesiones se deben tomar como tal la prestación de tratamientos médicos, higiene insuficiente y aspecto desaseado, malnutrición, deshidratación, depresión, retraimiento, aislamiento social o físico impuesto y mención de la palabra castigo por el mayor o los cuidadores, entre otros.

Para la directora gerente de UDP, Francisca Tricio, el gran problema que rodea a esta cuestión es la falta de denuncias. «Hay que ser valiente y denunciar a la menor sospecha», ha animado a hacer, sobre todo, a los vecinos de esos mayores, ya que este tipo de maltrato suele llegar casi siempre por parte de los familiares más directos de los ancianos. “Se debe tener claro”, declaró Tricio, que el tema del maltrato es una realidad de enorme importancia,  que en modo alguno se puede minimizar. La mayor parte de las acciones u omisiones de maltrato son constitutivas de delito o falta y muchas de ellas llevan unida la responsabilidad civil.”

Desde abril de 2003, UDP viene celebrando todos los años y en distintas localidades de España seminarios sobre el maltrato a personas mayores. De este modo, contribuye a la prevención, tratamiento y a la  persecución de este tipo de casos de violencia.

Para más información:

Malos tratos a personas mayores